Aquí un manifiesto elaborado por algunos compañeros y padres, en contra del sistema educativo actual, así como contra el pacto educativo.
http://manifiestomp.com/
En el siguiente, la contestación de D. Daniel R.Arenas, que en contra del manifiesto, muestra su convencimiento de la dirección que debe tomar nuestro sistema
http://manifiestomp.com/
En el siguiente, la contestación de D. Daniel R.Arenas, que en contra del manifiesto, muestra su convencimiento de la dirección que debe tomar nuestro sistema
El comentario de Daniel con el que estoy más de acuerdo es aquél en el que dice que la pedagogía es una ciencia "de la que adolecen la mayoría de los docentes en nuestro país", ya que, como sin duda sabe nuestro docto hombre, adolecer no es más que tener o padecer algún defecto.
ResponderEliminarMenos mal que conocer el significado de las palabras que uno utiliza sigue siendo uno de esos aprendizajes memorísticos que merecen ser salvados de la quema, sin duda debido a su contribución a la competencia en comunicación lingüística, ya que, de lo contrario, podríamos acabar diciendo lo contrario de lo que queremos decir.
Aun así, querido Daniel, tranquilo, creo que aún no son mayoría, o al menos no una amplia mayoría, los docentes que pecan de padecer semejante defecto consistente en el conocimiento de la ciencia pedagógica. Creo que aún podemos albergar alguna esperanza.
A mi anónimo replicante solo añadir que "adolecer" no es es "tener o padecer algún defecto" como le conviene decir, sino "caer enfermo o padecer enfermedad habitual" "paceder vicios o malas cualidades", según el Diccionario de la R.A.E.
ResponderEliminarAsí pues, desgraciadamente para nuestro país y nuestros hijos, me reafirmo en la idea clara de que en nuestro sistema educativo muchos docentes padecen "vicios o malas cualidades" por aborrecer la ciencia (pedagógica y psicopedagógica)que deberían profesar y que, sin embargo, ignoran y al ignorar, desprecian. Así les va. Sin embargo, ser docente y ser pedagogo no son (o no deberían)cosas separadas.
Daniel
En la vigésima segunda edición del Diccionario de la R.A.E. (que además cualquiera puede consultar on line en la página www.rae.es) se contemplan cuatro acepciones del verbo adolecer, la tercera de ellas dice literalmente: "tener o padecer algún defecto".
ResponderEliminarÁsí que, Daniel, no es lo que a mí me conviene decir, sino lo que la RAE dice.
Es cierto que la segunda acepción dice: "caer enfermo o padecer enfermedad habitual". Si prefieres considerar la pedagogía una enfermedad antes que un defecto, lo dejo a tu elección, a mí me parece francamente exagerado.
Lo que no veo por ninguna parte es referencia alguna a vicios o malas cualidades, quizá debido a que manejemos distintas ediciones del diccionario. Si fueses tan amable de indicarnos la tuya, podríamos contrastarlo.
De todos modos, e independientemente de que tú prefieras hablar de enfermedad y yo de defecto, como veo que la definición del diccionario no te basta para comprender el significado de adolecer ni cuál debe ser su uso, cito literalmente lo que al respecto comenta Fernando Lázaro Carreter en su libro El dardo en la palabra (Galaxia Gutemberg, Editorial DeBolsillo, ISBN: 84-9759-280-8, pag. 493):
"Así, nadie ni nada pueden adolecer de cosas o de cualidades positivas, porque éstas no causan mal ni constituyen enfermedad. No es posible adolecer de rigor ni de escuelas, sino de ausencia o escasez".
Más adelante: "Una empresa puede adolecer de escasos recursos, pero no puede adolecer de recursos porque eso, lejos de producirle dolor, le causaría gozo espasmódico".
Te animo ahora a que releas el comentario que hiciste (me refiero al comentario "en rojo" al texto del manifiesto) y extraigas tus propias conclusiones.
Querido Anónimo,
ResponderEliminarDoy por hecho que será usted docente o padre, o quizá ambas cosas a la vez. Si es así sabrá que, a veces no sólo el sentido común, que dicen tener la mayoría de los ciudadanos, sirve para educar o enseñar.
¿Qué se necesita para "saber" enseñar? Tengo la impresión que sin la pedagogía, tan desdeñada por muchos, nadie podría enseñar, aunque usted mismo la "niegue", estoy segura que sabe usarla, y lo hace.
Otra cosa es, que como en toda profesión, si no se pone en práctica correcta un método, pueda ser evaluado. Creo que en estas estamos, casi nadie quiere usar su programación, por ejemplo, prefiere usar un libro..
Espero pues ante posturas contrapuestas como estas que se muestran en los últimos comentarios, se ponga de manifiesto que dar la importancia justa a la pedagogía, es precisamente lo que se debe dar en el pacto educativo, creo que pensando así, se proyectarán más y se pondrán en su sitio los aprendizajes necesarios. En particular los que desde mi puesto trabajo.
Mercedes
Por zanjar el asunto referente al uso del verbo adolecer.
ResponderEliminarNo me parece realmente importante cometer un error en su uso, al fin y al cabo todos nos equivocamos en alguna ocasión, lo que me parece grave es dejarse llevar por un orgullo irracional y no reconocer el error e incluso llegar a mentir o a dar citas falsas. Al menos me resulta significativo.
Además diré que ni me gusta el tono en que está redactado el tal manifiesto (o la presentación del mismo, ya que el texto arriba comentado no es el correspondiente al manifiesto en sí) ni el tono en que están redactados los comentarios al mismo. Ambos me parece que pecan de dos graves defectos: uno es llevar la discusión sobre la educación al plano ideológico, y el segundo, y más grave, es utilizar un tono insultante que me parece francamente impresentable. Que a estas alturas de la vida tengamos que recurrir a acusaciones de rojerío o de facherío al hablar de educación lo dice todo.
Si además el que adopta una postura supuestamente más progresista se permite argumentar contra un manifiesto diciendo que los únicos que pueden representarnos son los partidos políticos y los sindicatos, la cosa clama al cielo. ¿Quién está hablando de representar a nadie? Estamos hablando del derecho de un grupo de personas a manifestar su opinión sobre un asunto concreto, y este señor les niega ese derecho diciendo que deben limitarse a meter una papeleta en una urna cada 4 años. ¿Qué será lo próximo? ¿Impedir el derecho de libre asociación? ¿Quién es el fascista?
El asunto a discutir no es pedagogía sí o pedagogía no.
Si entendemos por pedagogía la ciencia que se ocupa de la educación y la enseñanza (tal como la define la RAE) creo que no hay nadie dedicado a la docencia que no se interese por ella.
Aquí el problema es que existe un colectivo, los pedagogos (me refiero a licenciados en pedagogía o similar), que se han adueñado del término y han conseguido que se identifique pedagogía con lo que no es más que una corriente pedagógica, que no es lo mismo. Colectivo que se permite decir que todos aquellos partidarios de otras corrientes pedagógicas (que no menosprecien por ejemplo la importancia de la memoria, o que reconozcan la importancia de la repetición sistemática como una herramienta útil de aprendizaje) no son más que ignorantes que desconocen lo que es la pedagogía y que por eso la desprecian. No. Eso no es ni ignorar ni despreciar a la pedagogía. Eso es, en todo caso, no estar de acuerdo con una determinada corriente pedagógica.
Es algo así como si los economistas partidarios del libre mercado se dedicaran a decir que todos aquellos que defiendan políticas intervencionistas estatales no son más que ignorantes que desconocen lo que es la economía y que por eso la desprecian. No. Simplemente son partidarios de otras políticas económicas.
O como si los filósofos de pensamiento racionalista empezaran a decir que todos aquellos con una visión empirista no son más que ignorantes que desconocen lo que es la filosofía y que por eso la desprecian.
Lo que es realmente sorprendente es que dentro del colectivo pedagógico (entiéndase de nuevo los licenciados en pedagogía o asimilados) no existe debate alguno sobre estas cuestiones. Que todos piensen igual. Que no haya voces discordantes. Que se comporten como autómatas programados que repiten una y otra vez un determinado mensaje y que además se permiten el lujo de tachar de ignorantes a todos aquellos que simplemente no comparten sus ideas...
Daniel responde a Anónimo:
ResponderEliminarPara no fatigar más el blog de mi querida amiga y compañera Merce y porque al publicar mi entrada me da un error el sistema, he contestado a mi anónimo defensor del "manifiesto por un sistema educativo eficaz, libre e independiente" con una nueva entrada en mi blog: http://psicoarenas.blogspot.com/p/temas-de-educacion.html